El desarme nuclear (III)


De la campaña estudiantil «Mi escenario, mi victoria»


¿Sabías que…? Desde 1983 hasta 2022, el presidente de la SGI, Daisaku Ikeda, publicó cuarenta propuestas anuales de paz en las que analizaba, desde la perspectiva de los principios básicos del budismo, diversos temas que enfrenta la sociedad global con el objetivo de ayudar a la consolidación de la paz y la seguridad humana. Este año, los compañeros del Departamento de Estudiantes de la SGEs estamos profundizando en la visión de Ikeda Sensei a través del estudio de estas propuestas, con la intención de forjarnos como individuos capaces de crear valor en nuestros respectivos escenarios.


Este mes continuamos profundizando en la cuestión del desarme nuclear. En la propuesta de paz de 2022, titulada Transformar la historia humana: Un haz de luz hacia la paz y la dignidad, Ikeda Sensei eleva dos proposiciones con el deseo de hacer realidad la abolición de las armas nucleares. Este mes nos centraremos en la segunda, que atañe al Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares (TPAN).

El significado del TPAN supera el marco de cualquier tratado convencional de desarme: en su raíz palpita un rotundo compromiso con las normas del humanitarismo –evitar la destrucción catastrófica– y de los derechos humanos –proteger el derecho a la vida de todas las personas del mundo–. […] [E]l TPAN es indispensable para proteger la paz de la humanidad en conjunto y la preservación del ecosistema global, base de la vida para las generaciones de hoy y del mañana.[1]

Así, Sensei considera que, teniendo presente el valor intrínseco del TPAN, se debería iniciar un franco y abierto intercambio de ideas sobre las consecuencias negativas que acarrean las doctrinas de seguridad dependientes de arsenales nucleares, tanto para el mundo de hoy como para nuestra existencia y para el futuro.

Además, nos recuerda que el compromiso de la SGI de abolir las armas nucleares se remonta a la proclama que formuló Josei Toda en 1957, cuando recalcó que el uso de estas armas por parte de cualquier Estado era un mal absolutamente condenable, y expresó: «Quiero exponer y arrancar de cuajo las garras que se ocultan en lo profundo de las armas nucleares».[2]

Después de más de medio siglo de esfuerzos colectivos desde aquella declaración, en 2021 entró en vigor el TPAN, un tratado que coincide en principio con la proclama del maestro Toda. Sensei concluye:

Llevar a término esta tarea es la forma de cumplir nuestra responsabilidad ante el futuro. Con esta firme convicción, la SGI seguirá promoviendo y expandiendo las redes solidarias de la sociedad civil, con especial foco en los jóvenes.[3]

Avanzando en nuestra campaña MI ESCENARIO, MI VICTORIA, ¿qué os parece si reflexionamos y compartimos nuestras ideas con los demás en relación con esto?

#miescenariomivictoria #desarmenuclear #derechoshumanos #estudiantes #crearvalor


[1] IKEDA, Daisaku: Transformar la historia humana. Un haz de luz hacia la paz y la dignidad, Rivas-Vaciamadrid: Ediciones Civilización Global, 2022, págs. 57-58.

[2] Véase IKEDA, Daisaku: Sabiduría para ser feliz y crear la paz. Parte 3, capítulo 31.22. Consultado en https://www.sokaglobal.org/es/resources/study-materials/buddhist-study/the-wisdom-for-creating-happiness-and-peace/chapter-31-22.html.

[3]Transformar la historia humana, op. cit., pág. 60.

Scroll al inicio