Reflexiones sobre el volumen 15 de La nueva revolución humana · Por Hiromasa Ikeda
EN EL CAPÍTULO «FLORECER» del volumen 15 de La nueva revolución humana, Ikeda Sensei escribe: «La característica distintiva del budismo Nichiren está en que pone énfasis en el kosen-rufu, es decir, en la amplia propagación de la Ley Mística […]. El budismo Nichiren también es una religión que busca establecer la enseñanza correcta para asegurar la paz en la tierra».
«Establecer la enseñanza correcta» es el acto de asentar la filosofía del budismo en el corazón de cada persona, tarea a la que nos dedicamos para «asegurar la paz en la tierra», es decir, para que haya paz y prosperidad en la sociedad. Si «establecer la enseñanza correcta» es la misión religiosa de quienes practicamos este budismo, entonces «asegurar la paz en la tierra» es nuestra misión social; solo cuando se logra este cometido podemos decir que nuestra misión religiosa ha culminado.
El capítulo «Revivir» inicia con la escena de la reunión general de la sede central de la Soka Gakkai del 3 de mayo de 1970, en la que Shin’ichi declara: «el kosen-rufu es un gran movimiento cultural que se desarrolla en el vasto terreno espiritual de la Ley Mística». Para cumplir su misión de asegurar la paz en la tierra, la Soka Gakkai emprendió un movimiento dirigido a incidir positivamente en la sociedad mediante el poder humanístico de la cultura. Y el primero en tomar esa acción fue Shin’ichi.
En el mismo capítulo se continúa detallando cómo a partir de esa época Shin’ichi comienza a componer poemas que dedica y obsequia a los miembros en diversas ocasiones como una manera de infundirles aliento. La poesía es para Shin’ichi un medio para señalar el gran camino hacia la paz y la dicha, así como ofrecer una visión del mundo y del entorno natural desde la perspectiva del budismo.
En el capítulo «Florecer» también se relata una escena en la que Shin’ichi toma fotografías en Hokkaido como otra forma de alentar e inspirar a los miembros, a quienes describe como los portaestandartes y protagonistas de la cultura humanística.
Yoshikazu Shirakawa, un reconocido fotógrafo japonés, comentó en una ocasión que las fotografías de Daisaku Ikeda reflejaban el sincero y genuino deseo de inspirar y llevar felicidad a cuantas personas fuera posible. Tal como señala este comentario, en las imágenes tomadas por Sensei afloran el deseo de alentar a los demás. El Seikyo Shimbun publica regularmente sus fotos, acompañadas de extractos de sus poemas y escritos. Este es su modo de alentar a los miembros y decirles: «¡No se den por vencidos! ¡Sean fuertes! ¡Avancen conmigo!».
Realizar propuestas concretas
En el otoño de 1970, la Soka Gakkai inicia de lleno los esfuerzos destinados a fomentar una cultura verdaderamente humanística. En ese entonces, la enfermedad de itai-itai y el mal de Minamata, que habían surgido producto de la contaminación ambiental en comunidades del Japón, acaparaban las noticias y la atención de la sociedad japonesa.
Shin’ichi aborda el tema cada vez más acuciante de la polución en un ensayo titulado «¿Acaso Japón es un laboratorio de contaminación atmosférica?» que se publica en una importante revista mensual de Japón. También redacta un artículo para la edición de otoño del Toyo gakujutsu kenkyu (boletín de Estudios Orientales) del Instituto de Filosofía Oriental afiliado a la Soka Gakkai. En estos escritos, Shin’ichi analiza el problema de la contaminación ambiental desde la perspectiva macroscópica de la sociedad humana en general. Sus artículos resultaron singulares, porque se remontaban a los orígenes del pensamiento que había llevado a la actual degradación y ofrecían pautas claras para solucionar el problema.
En el capítulo «Juramento» del volumen 30, Shin’ichi rememora cómo el maestro Toda le había enfatizado la importancia de presentar propuestas concretas por la paz, así como de tomar iniciativas para su concreta realización. Toda Sensei le había dicho:
Aún cuando estas sugerencias no sean aceptadas totalmente o en forma inmediata, pueden actuar como una «chispa» que se expande y da lugar a un gran movimiento por la paz, como reguero de pólvora. Las teorizaciones desvinculadas de la realidad no dejan de ser más que abstracciones vanas. Pero una propuesta concreta nos brinda un marco para transformar la realidad y proteger los intereses de la humanidad.
Los artículos de Ikeda Sensei sobre la contaminación ambiental fueron una manera de llevar a la práctica las guías de su mentor. Es con este espíritu que Ikeda Sensei ha venido presentando sus propuestas de paz cada 26 de enero, el Día de la SGI, desde 1983.
Los integrantes del Departamento de Jóvenes de la Soka Gakkai de Japón lanzaron recientemente una iniciativa llamada Acción Global SOKA 2030 como un esfuerzo para implementar y hacer realidad las ideas y la visión sobre la paz que Ikeda Sensei ha venido dilucidando en sus propuestas. El 2030 marcará el centenario de la Soka Gakkai y es también el año en que las Naciones Unidas han fijado como plazo para concretar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Con miras a este hito, el programa Acción Global SOKA 2030 llevará a cabo actividades que contribuyan a impulsar mucho más en el mundo la corriente en oposición a la guerra y al uso de las armas nucleares; fomentar la amistad y la solidaridad en Asia; y promover ampliamente los ODS.
En la propuesta de paz de este año, Ikeda Sensei habla sobre esta iniciativa por la paz liderada por los jóvenes y manifiesta las profundas expectativas que deposita en ellos: «Tengo la profunda convicción de que, mientras exista solidaridad entre los jóvenes, no habrá crisis que no podamos superar».
La juventud es la fuerza que abre el camino hacia el futuro. Tal como escribe Ikeda Sensei: «Cuando los jóvenes se levantan, las ruedas del tiempo empiezan a moverse en una nueva dirección». Oremos sinceramente para que los integrantes del Departamento de Jóvenes puedan desplegar todo su potencial sin restricciones.
Cristalización del espíritu de maestro y discípulo
El capítulo «Universidad Soka» describe la historia y evolución de dicha institución desde su apertura hasta la graduación de su primera promoción de estudiantes.
Hoy, en la entrada y en la torre principal de la universidad, se exhiben dos placas con la caligrafía del presidente fundador de la Soka Gakkai, Tsunesaburo Makiguchi, donde se leen los ideogramas chinos que componen la palabra Universidad Soka. Crear un sistema pedagógico integral que abarcara desde la primaria hasta la secundaria, era el sueño del presidente Makiguchi y una visión que expuso en su obra Soka Kyoikugaku Taikei (Sistema pedagógico para la creación de valores).
El maestro Toda heredó esta visión de su mentor y, en noviembre de 1950, a pesar de la difícil situación en la que se encontraba en ese momento luego de haber tenido que suspender las labores comerciales de su empresa, Toda Sensei le trasmite a Shin’ichi el deseo de crear una universidad. Shin’ichi asume estas palabras como un legado que graba profundamente en su vida.
La Universidad Soka se inaugura finalmente el 2 de abril de 1971. Dicho año marcaba el centenario del nacimiento del maestro Makiguchi y la fecha 2 de abril, el aniversario del fallecimiento del maestro Toda. La fundación de la Universidad Soka fue, ciertamente, la cristalización del espíritu de mentor y discípulo de tres generaciones.
Durante una conversación que Shin’ichi mantiene con varios estudiantes de la primera promoción les dice que ellos también son, al igual que él, «los fundadores de la Universidad Soka». Creyendo firmemente en los estudiantes y seguro de que asumirían el desafío de construir la universidad con el mismo sentido de responsabilidad que su fundador, Shin’ichi se abstiene deliberadamente de hacer visitas oficiales al campus. De hecho, por respeto a la autonomía de la universidad, Shin’ichi no asiste a la ceremonia de inauguración ni al acto de ingreso de la primera promoción, a pesar de su posición como fundador. La primera vez que visita de manera oficial el campus en noviembre, durante el festival de la universidad, queda claro el profundo amor que profesaba por los estudiantes, así como el ideal de hacer de la Universidad Soka una institución centrada en el alumno.
Además, durante su discurso en la primera ceremonia de graduación, Shin’ichi se refiere al principio budista que afirma «la asamblea en el Pico del Águila todavía no se ha dispersado» para explicar que «aunque en cierto modo debamos disgregarnos, siempre estaremos juntos». Luego, les propone a los estudiantes «prométanme que, como egresados de la Universidad Soka, mantendrán de por vida la convicción de que esta <asamblea> prosigue y que todos estarán siempre conectados en el corazón». Teniendo esta promesa como punto de partida, hoy, los egresados de la Universidad Soka alrededor del mundo están contribuyendo activamente en diferentes ámbitos de la sociedad.
La Universidad Soka celebrará el próximo año su 50.º aniversario. Hoy esta casa de estudios superiores ha sido seleccionada para formar parte del Programa de universidades globales del Ministerio de Educación, Cultura, Deporte, Ciencia y Tecnología de Japón; y sus esfuerzos por participar activamente en los ODS también han sido altamente reconocidos por publicaciones académicas, incluyendo la Times Higher Education de Reino Unido.
De esta manera, la misión de la Universidad Soka –construir un camino hacia la paz duradera mediante la forja de personas decididas a contribuir positivamente con la sociedad– continúa adquiriendo aún mayor relevancia. |
Pasajes clave del volumen 15
El humanismo verdadero concibe al hombre en armonía con la naturaleza; es decir, parte de la concepción del hombre como entidad integrada a su entorno natural. («Revivir»).
cambian la sociedad y el curso de la historia son las personas. La historia se transforma cuando el pueblo adquiere sabiduría y se yergue como protagonista de un cambio. («Revivir»).
El estudio y la carrera académica no son herramientas para la consecución de éxitos personales, sino para ser puestos en función de la felicidad de la gente. Podemos decir que el estudio universitario está para servir y contribuir a quienes no han tenido la oportunidad de acceder a ella. («Universidad Soka»).
La enseñanza comienza a partir del docente. De la calidad humana del maestro depende la labor creadora de valor que es la educación. En tal sentido, los profesores constituyen para el estudiante su principal entorno formativo. («Universidad Soka»).
Un saludo es un llamado a la puerta del corazón; el saludo cálido y cordial es un gesto que refleja una genuina nobleza humana. («Florecer»). |
Resumen del volumen 15
Revivir
Shin’ichi aborda los problemas derivados de la contaminación ambiental, tales como el envenenamiento por mercurio en la ciudad de Minamata, y alienta a los afectados. Se celebran festivales culturales en todo Japón. Shin’ichi compone una serie de poemas que incluyen la «Canción de la juventud».
Universidad Soka
La Universidad Soka se funda en abril de 1971. Shin’ichi participa en varios festivales organizados por los estudiantes y señala el camino hacia el logro de una educación humanista.
Florecer
Shin’ichi comienza a tomar fotografías para alentar a los miembros. En Kamakura y Misaki, prefectura de Kanagawa, los miembros entablan vínculos de amistad con la comunidad local mediante actividades culturales. Shin’ichi y los miembros apoyan los esfuerzos de ayuda a los participantes del encuentro de Jamboree Scout Mundial que habían sido afectados por un fuerte tifón. |
(Los textos que integran esta sección son traducciones del artículo publicado el 29 de enero de 2020 en el Seikyo Shimbun).