Expandamos nuestro alentador movimiento de respeto a la dignidad de la vida


Lo que sigue es un extracto del mensaje enviado por Daisaku Ikeda a la 7.ª reunión de la sede central para responsables de la Soka Gakkai con miras al centenario en 2030, celebrada en el Centro Cultural Ikeda de Hyogo, en Kobe, el 6 de febrero.

[…] Nichiren Daishonin cita un antiguo proverbio que dice: «El uno es madre de diez mil».[1] Todo comienza a partir de una sola persona que se arma de valentía para invitar a otras a un diálogo sincero.

En febrero de 1952, en tándem con la Campaña de Febrero del distrito general Kamata, un joven compañero se puso en acción asumiendo el mismo espíritu que me impulsaba y, con enérgica postura de pionero, introdujo al primer nuevo miembro en Kansai. Estos esfuerzos silenciosos y anónimos allanaron el camino para el desarrollo de nuestra grandiosa y mundialmente admirada organización en Kansai. […]

*

Recuerdo que, durante el Incidente de Osaka[2] [capital de la región de Kansai], mientras estaba detenido para ser interrogado, los miembros locales me hicieron llegar un ejemplar de los escritos del Daishonin. Ese volumen, con la autorización sellada por el centro de detención, se ha conservado celosamente como testimonio para la posteridad.

Mientras estemos unidos por el firme compromiso de basarnos en los escritos del Daishonin, no hay nada a lo que debamos temer. Hay un pasaje de una de las cartas del Daishonin que los miembros de Kansai y yo hemos grabado en nuestro corazón:

Ahora bien, usted y yo [Nichiren] estamos unidos por los lazos de maestro y benefactor laico. Pero mientras usted viva, [por tratarse de un ser humano corriente,] dotado de órganos sensoriales y sujeto a los desbordamientos de las impurezas, debe seguir y obedecer al soberano del país. Por tal motivo, aunque hoy se vea en esta situación de peligro, apenas puedo contener las lágrimas [pensando en que esta crisis personal le servirá para expiar sus faltas pasadas] […]. Su cuerpo debe afrontar los peligros de esta crisis, pero su corazón y el corazón del Buda son inseparables. Y aunque en esta vida deba entrar en el reino de los asuras, en su futura existencia sin falta habitará en la tierra de buda.[3]

En esta época de convulsión y confusión, en la que los desafíos parecen no acabar nunca, los miembros de la Soka Gakkai nos dedicamos a enseñar a otras personas la práctica de la Ley Mística. Con la misma intención que el Buda y el mismo corazón del Daishonin, nos esforzamos en cultivar en lo profundo de nuestra vida un estado de felicidad inalterable y eterno, y en inspirar a otros a hacer lo mismo. Nuestras acciones, valerosas y pacientes, transforman positivamente los lugares donde vivimos y la sociedad, alineadas con las «tres purificaciones de la tierra» expuestas en el Sutra del loto[4] y con el propósito de realizar el ideal del Daishonin de «establecer la enseñanza correcta para asegurar la paz en la tierra».

Este es el espíritu de la Soka Gakkai cuyo origen se remonta a los presidentes Makiguchi y Toda. […]

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Centro Cultural Ikeda de Hyogo, en Kobe | Foto: Seikyo

Cuando se produjo el devastador terremoto de Kobe, en enero de 1995, este centro cultural donde hoy se está llevando a cabo nuestra reunión, al igual que otros edificios de la Soka Gakkai en zonas afectadas de Hyogo y de Kansai, prestó servicios como centro de evacuación, punto de entrega de víveres, y nodo coordinador de tareas de rescate. Nuestras instalaciones ejercieron de castillos protectores de la gente. Valientes compañeros de Kansai y de otras regiones del país, en especial nuestros jóvenes Bodisatvas de la Tierra, fueron un ejemplo de solidaridad, apoyando sin reservas las tareas asistenciales y de reconstrucción. Jamás olvidaré esta admirable página de nuestra historia.

Hoy, en el marco de los proyectos para celebrar nuestro centenario, estamos planeando la construcción de un nuevo y magnífico auditorio de la Soka Gakkai en Kansai. Sé que los miembros de todo el mundo seguirán esto con gran expectativa.

El Daishonin escribe que, si nuestras oraciones son fuertes, la protección de las deidades celestiales se manifestará de manera rotunda. […] ¡Les pido que hagan resonar, con toda potencia, una canción primaveral que vibre de felicidad y transmita un espíritu eternamente victorioso! […]

(Traducción del artículo publicado el 7 de febrero de 2022 en el Seikyo Shimbun).


[1]Conversación entre un venerable y un hombre no iluminado, en END, pág. 136.

[2]Incidente de Osaka: Daisaku Ikeda, quien en ese entonces ejercía de responsable del grupo directivo del Departamento de Jóvenes, fue arrestado el 3 de julio de 1957 y acusado injustamente de violar la ley electoral en las elecciones de renovación parcial de la Cámara de Senadores de Osaka. A ello siguió un juicio que duró casi cinco años, al cabo de los cuales fue exonerado de todos los cargos.

[3]WND-2, págs. 958-959.

[4]Véase SL, cap. 11, «El surgimiento de la torre de los tesoros», pág. 173.

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