Desde el curso de verano de estudio
Los pasados 21 y 22 de agosto, con el lema Fresh Waves of Hope, se celebró una histórica edición del Curso de Verano de Estudio Juvenil de la SGI de Europa, con la participación de casi mil personas de 36 países del continente, siendo la gran mayoría miembros del Departamento de Jóvenes. Entre ellas se encontraban una cincuentena de representantes de la SGEs.
Los asistentes al curso, que se realizó en formato de videoconferencia, escucharon juntos un mensaje de Daisaku Ikeda, en el que el maestro ensalzaba su existencia: «¡Cuán noble la vida de cada uno de ustedes, quienes asumen la misión prodigiosa de propagar la Ley Mística de acuerdo con el gran juramento del Buda del Último Día de la Ley!». Seguidamente, tuvieron la oportunidad de tomar parte en una sesión de estudio a cargo del responsable del Departamento de Estudio de la SGI, Masaaki Morinaka. En un momento aún marcado por las consecuencias de la pandemia de la COVID, profundizó en el significado del principio de «descartar lo transitorio y revelar lo verdadero» y en la importancia del juramento para no retroceder ante las dificultades y para no caer en la desconfianza e incapacidad de creer en el potencial propio y de las otras personas.
A continuación, una extensa sesión de preguntas y respuestas a cargo de diferentes responsables europeos permitió a la audiencia profundizar en diversos aspectos de la vida cotidiana desde el punto de vista de la fe. La diferencia entre el diálogo budista y las herramientas de comunicación digital; la relación entre redes sociales, el diálogo y la verdad; y la deuda de gratitud con el maestro fueron algunos de los temas abordados.
Tras una intensa primera jornada de estudio, la segunda estuvo marcada por el arte, las experiencias de fe y el diálogo.
Los miembros del Departamento de Jóvenes comenzaron el día con cálidas reuniones de diálogo en las que, superando con creces las barreras idiomáticas, compartieron con compañeros de otros países impresiones de lo aprendido en las sesiones de estudio, así como experiencias y reflexiones personales.
El vigoroso espacio cultural, para el que se reincorporaron también los participantes séniores, fue protagonizado por jóvenes de diversos países –entre ellos, España y Portugal– que compartieron piezas audiovisuales animadas por música, danza y poesía. Y cuatro miembros del Departamento de Jóvenes de Portugal, Austria, Reino Unido y Alemania contaron alentadoras experiencias de fe en ámbitos como la salud o el trabajo.
Finalmente, hubo informes de actividades de diferentes países y, gracias a la participación de dos estudiantes europeos (de Italia y España), que se conectaron desde Tokio, también un espacio dedicado a dar a conocer una institución educativa fundada por Daisaku Ikeda: la Universidad Soka de Japón.
Este histórico curso juvenil de verano representó el inicio de las conmemoraciones del 60.º aniversario del kosen-rufu en Europa, así como la determinación de crear las circunstancias para un brillante decenio hacia el centenario de la fundación de la Soka Gakkai, en 2030.