«Alegres antorchas pioneras»
Daisaku Ikeda señaló en alguna ocasión que el ideograma chino para el número ocho contiene el significado de «abrir». Solo unas semanas después del 8.º aniversario de su formación, la región Norte de la SGEs celebró su primer curso propio, el 26 y el 27 de octubre en el Centro Cultural Soka. Asistieron 84 personas, muchas de las cuales visitaban la sede de la SGEs y el Jardín de la Paz por primera vez. La unión del equipo organizador, así como la lucha personal de cada uno, fueron claves para enfrentar los múltiples desafíos previos y concretar este éxito de participación. El lema elegido, «Alegres antorchas pioneras», alentaba a disfrutar de la alegría que proviene de la fe, levantándose cada uno en su lugar para recibir el testigo espiritual del maestro y ser un faro en la sociedad.
La región Norte, que se extiende desde Asturias hasta Aragón, se caracteriza por que la distribución de sus miembros –que este año han alcanzado la cifra de 500– en su amplio territorio hace que cada uno sea un pionero allí donde está, a menudo formando parte de un pequeño grupo de practicantes, cuando no siendo el único o la única en su localidad.
Las sesiones de estudio ofrecieron la oportunidad de profundizar en el sentido del lema a partir de la orientación de Ikeda Sensei. Las reuniones de diálogo permitieron ahondar el conocimiento mutuo y la realidad de cada lugar. Y los relatos de experiencias confirmaron el poder de la fe.
También se destacaron propuestas creativas: un diálogo con mímica sobre los diez estados; un concurso y un rap para alentar a la suscripción y la lectura de la revista CG; una búsqueda de los tres tesoros en el Jardín de la Paz; y un amigo invisible. Además, cada distrito general preparó un espectáculo y, tras ensayarlos con entusiasmo durante los descansos del curso, su presentación dio lugar a un verdadero festival.
Para concluir, cada participante escribió sus determinaciones y estas se guardaron en una caja que, a modo de cápsula del tiempo, se abrirá el 18 de noviembre de 2030.
De este modo, con gran alegría y con recuerdos inolvidables, los pioneros de la región Norte partieron de regreso a sus tierras unidos por el compromiso de romper sus propios límites en el diálogo y el aliento hacia el centenario de la Soka Gakkai.