¡Cada día trae un nuevo mañana!


Jóvenes fénix · A los miembros del Departamento Futuro de la SGEs


¡Hola, compañeras y compañeros!

¿Habéis leído el libro Ana de las Tejas Verdes? Es la historia de una niña que, sin importar las cosas tristes o descorazonadoras que le puedan ocurrir, a la mañana siguiente siempre vuelve a ser alegre como un sol.

Basándose en esta historia, en el libro Un arcoíris de esperanza Ikeda Sensei nos asegura que «aunque nos pase algo malo o algunas veces nos sintamos desilusionados, estas vivencias serán para nosotros una fuente de fortalecimiento y nos ayudarán en el largo transcurso de la vida».[1] Y añade: «Lo crucial es que no os deis por vencidos, pase lo que pase, y que no dejéis que vuestros errores o fracasos os desanimen».[2]

La autora de Ana de las Tejas Verdes, L. M. Montgomery, a pesar de muchas dificultades y de haber vivido sin sus padres, perseveró realizando esfuerzos sobre todo a primera hora de la mañana, jornada tras jornada, junto con el sol de cada nuevo día, lo que le permitió finalmente hacer realidad su sueño de ser escritora.

Sensei sigue alentando a todos los niños y niñas del Departamento Futuro a no dejar de creer en nosotros mismos y en nuestros sueños, diciendo: «Aunque a veces pensemos que los momentos difíciles y tristes de nuestra vida durarán para siempre, la mañana siguiente llega. En lugar de preocuparnos pensando si triunfaremos o fracasaremos, lo más importante es dar lo mejor de nosotros. Si no lo logramos, volvamos a intentarlo, ¡como el sol, que sale cada día, pase lo que pase!».[3]

En las orientaciones que Ikeda Sensei escribe para nosotros, el Departamento Futuro, podemos leer también: «Entonar Nam-myoho-renge-kyo, aunque sea una sola vez, impregna el universo entero. Por ello, si continuáis orando, esforzándoos de manera constante y desafiándoos a vuestro propio ritmo, sin falta podréis desplegar plenamente vuestro potencial, tan vasto como el mismo universo infinito».[4]

Puede que estas palabras de Sensei os resuenen porque hayáis pasado o estéis pasando alguna situación que os haga sufrir, como por ejemplo sentir que no tenéis amigos, o que se han burlado de vosotros, o que alguna asignatura en el colegio no os gusta y os cuesta más aprenderla… Sin embargo, no debemos desanimarnos y podemos dar un paso de coraje. ¿Qué os parece si cada mañana, con la decisión de que «¡hoy es un nuevo comienzo!», empezamos con energía haciendo el gongyo y entonando Nam-myoho-renge-kyo para extraer nuestro potencial? Cuando no tengáis tiempo para el gongyo, podéis recitar Nam-myoho-renge-kyo tres veces. Y así, ¡avancemos con alegría y optimismo!


[1]IKEDA, Daisaku: Un arcoíris de esperanza, Rivas-Vaciamadrid: Ediciones Civilización Global, 2022, pág. 90.

[2]Ib.

[3]Ib., pág. 93.

[4]IKEDA, Daisaku: «¡Hagamos del 2023 un año de rotunda victoria para el Departamento Futuro!», Mirai Journal, 01/01/2023.

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