De pie y de paz


Desde el Departamento de Jóvenes de la SGEs

Avanzando con la iniciativa de leer La nueva revolución humana al ritmo de un volumen al mes, este mes abordamos el volumen 19.

en el capítulo «La torre de los tesoros» del volumen 19 de La nueva revolución humana, leemos que los miembros jóvenes de Okinawa, Hiroshima y Nagasaki deciden desafiarse a realizar entrevistas a personas mayores y concretar la publicación de sus vivencias bélicas. Con la determinación de que la tragedia de la guerra no se repitiese jamás, estos jóvenes pretendían promover la paz y responder a su maestro. La publicación antibélica finalmente alcanzó ochenta tomos, publicados durante doce años.

Moriyama, el responsable del Departamento de Estudiantes de Okinawa que supervisaba el proceso de edición, un día visitó a Shin’ichi para informarle sobre esta actividad. En la conversación que mantuvieron, Shin’ichi le habló de la misión de cada uno para hacer la propia revolución humana, transformar el karma y realizar el kosen-rufu, diciendo:

Cuando asumimos esta misión manifestamos el estado de vida inherente de la budeidad junto con las cuatro virtudes y elementos representados por los cuatro adalides de los Bodisatvas de la Tierra. Esto es lo que nos permite transformar fundamentalmente nuestro estado de vida, hacer la revolución humana y cambiar nuestro karma.

De este modo, tal como somos, podemos hacer brillar nuestra vida, y a medida que superamos diversas dificultades –como enfermedades, problemas económicos o difíciles relaciones humanas– demostramos la prueba del poder benéfico de la Ley Mística. En realidad, tenemos un karma precisamente para poder mostrar la prueba real del budismo del Daishonin.[1]

La humanidad enfrenta ahora una incertidumbre sin precedentes en todo el mundo.

Los miembros de SGI encaramos toda clase de dificultades con daimoku para poder avanzar más que nunca en lo personal y en el progreso de nuestras comunidades locales.

En este sentido, Shin’ichi alentó a Moriyama sobre cómo ver las dificultades de su propio karma y transformarlas en misión.

Ya veo. Así que Creciste huérfano de padre, tu familia era pobre y no te gustaba hablar en público. Bueno, precisamente por eso tienes la misión de ser un gran líder del pueblo de Okinawa. Tienes las condiciones para ello. […]

Parece un sinsentido, ¿verdad? Sin embargo, por lo que has vivido, puedes comprender el sufrimiento de quienes han perdido a su padre, sabes lo que es tener penurias económicas y puedes entender los sentimientos de las personas que son tímidas y reservadas. Todas estas son cualidades importantes para un líder. […] Una prueba real demuestra la validez del budismo del Daishonin y contribuye a hacer avanzar el kosen-rufu. El karma con el que naciste es tu misión.[2]

Este 15 de octubre es el 59.º aniversario de la primera visita de Ikeda Sensei a España, y el 29 de noviembre tendremos el festival online «Protagonistas de la alegría», conmemorando el 90.º aniversario de Soka Gakkai.

A partir de esta lucha inseparable de maestro y discípulo, preguntémonos: «¿cómo puedo responder a mi maestro?» y «¿qué prueba real puedo concretar para compartir con mis compañeras y compañeros de fe?».


[1] ↑ IKEDA, Daisaku: La nueva revolución humana, vols. 19 y 20, Rivas-Vaciamadrid: Ediciones Civilización Global, 2020, pág. 172.

[2] ↑ Ib., pág. 169.

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