El gran remedio benéfico


En esta sección ofrecemos recursos para las reuniones de diálogo de la SGEs. Estos son: una cita que alumbra la trascendencia de los esfuerzos que cristalizan en estos encuentros («Globalmente»), la presentación de uno de los grupos que los sostienen («Localmente»), un pasaje de los escritos de Nichiren Daishonin comentado por Daisaku Ikeda («Avanzando con el Gosho»), una «Perspectiva» y algunas «Palabras clave».

GLOBALMENTE

«El gran ideal enarbolado por la Soka Gakkai es establecer la paz mundial.
Es lograr la tranquilidad y la seguridad de las personas comunes
y la felicidad de toda la humanidad.
Esta gran visión es lo que llamamos “kosen-rufu”.
El propósito primordial de nuestro avance como familia Soka
reside en hacer realidad esta […] magnífica epopeya que se transmite del maestro a los discípulos,
de padres a hijos y de una generación a la siguiente».[1]

«Nuestras acciones para expandir la solidaridad de la paz
en el lugar donde nos encontramos ahora,
esforzándonos por transformar nuestra vida e inspirando a quienes nos rodean,
pueden parecer poco fascinantes.
Sin embargo, en ellas reside […]
el camino más seguro para cambiar el mundo.
Entonando con diligencia un resonante daimoku,
[…] ¡tendamos la mano a los demás a través de un diálogo valiente
y hagamos surgir el sol de la esperanza en el corazón de todas las personas […]!».[2]

LOCALMENTE

Grupo Mar de Alegría

En el Sutra del loto se lee que «la Ley predicada por el Buda se compara con una gran nube cuya lluvia […] humedece las flores humanas».[3] El primer grupo de diálogo de la SGEs en la esmeralda Asturias se llamó, precisamente, Orbayu, término que alude a la característica llovizna de la cornisa cantábrica. Tras años de lucha pionera, esta empapó la tierra hasta formar, junto con otros nuevos grupos, el que presentamos: un verdadero mar de alegría.

(Envío de imágenes a: prensa@ediciones-civilizacionglobal.com)

AVANZANDO CON EL GOSHO

El medicamento espléndidamente efectivo del Sutra del loto [Nam-myoho-renge-kyo] proporcionará la cura de todos estos graves males.

(La forma de lograr la budeidad mediante el «Sutra del loto» para aquellos que aspiran al Camino por primera vez, en END, pág. 921).

«En esta época de convulsión y confusión, en la que los desafíos parecen no acabar nunca, los miembros de la Soka Gakkai nos dedicamos a enseñar a otras personas la práctica de la Ley Mística. Con la misma intención que el Buda y el mismo corazón del Daishonin, nos esforzamos en cultivar en lo profundo de nuestra vida un estado de felicidad inalterable y eterno, y en inspirar a otros a hacer lo mismo. Nuestras acciones, valerosas y pacientes, transforman positivamente los lugares donde vivimos y la sociedad, alineadas con las “tres purificaciones de la tierra” expuestas en el Sutra del loto y con el propósito de realizar el ideal del Daishonin de “establecer la enseñanza correcta para asegurar la paz en la tierra”».[4]

«La Ley Mística es el gran remedio benéfico que puede guiar a todas las personas por igual, sin discriminación, hacia la felicidad y la paz.

La visión de mi maestro Josei Toda de unir a la humanidad en una sola familia global nacía de su apasionado deseo de que ningún pueblo, en ningún país, se viese empujado a las profundidades de la infelicidad.

La gente, en todas partes, desea vivir feliz y en paz. Espero que, cuanto mayores sean los desafíos, más unan ustedes […] sus fuerzas y su pasión. Juntos, continuemos invitando a las demás personas al diálogo para construir un mundo mejor. Fortalezcamos nuestras oraciones unidas para llevar paz al planeta –el lugar donde nos hemos reunido como Bodisatvas de la Tierra– y hagamos realidad las palabras del Sutra del loto que afirman que “esta, mi tierra, permanece a salvo y en calma”».[5]

PERSPECTIVA

Profundizando en el significado de las «tres purificaciones [o transformaciones] de la tierra», Daisaku Ikeda observó: «Aun en el ámbito de las relaciones internacionales, los seres humanos siempre terminan siendo la clave. Los países son solo conjuntos de personas, creados por personas. Por ende, es imposible que no cambien si cambia la gente. Es más, se debería asumir que el Estado existe en bien del pueblo, y no a la inversa. A causa de diversos apegos o prejuicios, la gente ha perdido de vista esta sencilla verdad […] [y] se encierran en sus pequeños mundos. Se puede respetar a los demás como seres humanos y emprender un diálogo verdaderamente sincero solo cuando se cortan las cadenas de dichos apegos».[6]

PALABRAS CLAVE

Enseñar a otras personas la práctica · El camino más seguro para cambiar el mundo · Paz en la tierra


[1]IKEDA, Daisaku: «¡Jóvenes, construyan la paz sobre el planeta Tierra!», Seikyo Shimbun, 13/3/2022.

[2]IKEDA, Daisaku: «Expandir las flores de la paz desde el lugar donde nos encontramos ahora», Seikyo Shimbun, 27/2/2022.

[3]SL, cap. 5, pág. 105.

[4]Véase este número, sección «Punto de partida».

[5]Ib.

[6]IKEDA, Daisaku: La sabiduría del «Sutra del loto»–1, Rivas-Vaciamadrid: Ediciones Civilización Global, 2016, pág. 432.

Scroll al inicio