Reflexiones sobre el volumen 23 de La nueva revolución humana · Por Hiromasa Ikeda
La tradición de cantar canciones dentro de la Soka Gakkai siempre ha sido parte de nuestro movimiento para el avance del kosen-rufu, y el capítulo «Valentía» del volumen 23 de La nueva revolución humana describe en detalle las circunstancias en que se compuso la «Canción de la revolución humana» en 1976. Ese año se celebraba el 20.º aniversario de la Manifestación de Osaka,[1] que representó un punto de partida de la lucha de Shin’ichi Yamamoto por la justicia y los derechos humanos. Esto lo motivó a componer una nueva canción que no solo reflejara el espíritu de la Soka Gakkai y su filosofía, sino que también infundiera valentía en los corazones de los miembros; una canción capaz de despertar en ellos el «inquebrantable espíritu de lucha para superar cualquier adversidad».
El capítulo muestra cómo Shin’ichi pone su máximo empeño en describir el momento de la iluminación de su maestro, Josei Toda, en prisión [donde había ingresado por negarse a transigir en sus creencias, y donde había tomado conciencia de su identidad como Bodisatva de la Tierra]. Una y otra vez, Shin’ichi escribe y reescribe la letra tratando de explicar el profundo despertar espiritual experimentado por Toda, que constituye la piedra angular de las convicciones que guían a la Soka Gakkai, organización que avanza en perfecta consonancia con la voluntad del Buda. Como resultado, nacen los siguientes versos en la segunda estrofa:
Bodisatvas de la Tierra,
tenemos una misión que cumplir en este mundo.
Así como la «Canción de la revolución humana» se convirtió en una poderosa fuerza motriz para el movimiento de la revolución humana, estoy convencido de que la nueva canción del Departamento de Jóvenes [titulada Eternal Journey with Sensei] también generará un gran impulso hacia la concreción del kosen-rufu mundial y motivará a nuestra juventud en su avance.
A UNA DÉCADA DE LA PRIMERA ENTREGA DE «LUCHA INTRÉPIDA»
El capítulo «Lucha intrépida» se publicó en el Seikyo Shimbun desde junio hasta agosto de 2010, el año del 50.º aniversario de la asunción de Daisaku Ikeda como tercer presidente y del 80.º aniversario de la fundación de la Soka Gakkai. Su primera entrega apareció en la edición del 3 de junio, el mismo día que tuvo lugar la reunión de la sede central para responsables.
El día antes de la reunión, el maestro Ikeda declaró que había llegado el momento de que los miembros asumieran la plena responsabilidad de la Soka Gakkai, que estaban en una coyuntura crucial que determinaría el futuro de la organización y que en adelante no deben esperar a recibir sus instrucciones. Y en el mensaje que envió para el encuentro, enfatizó:
[E]ste es el momento de dar los toques finales a mi labor y dejar todo en manos de ustedes. […] Cuando los discípulos se ponen de pie mucho más comprometidos aún con su misión, en respuesta a la orientación y a las enseñanzas recibidas de su maestro, se genera un impulso nuevo y dinámico enfocado en la victoria y en el progreso, un impulso que abre rutas hacia un luminoso porvenir.
La entrega de «Lucha intrépida» publicada aquella mañana comenzaba: «La sociedad y los tiempos mostraban cambios constantemente. De la misma manera, la Soka Gakkai estaba ingresando en una nueva etapa con sus nuevos centros culturales y de capacitación y el surgimiento progresivo de numerosos valores humanos». El capítulo continúa explicando cómo, en agosto de 1976, Shin’ichi informa a un joven de Osaka de que, muy a su pesar, no podría asistir al Festival Cultural de Kansai que iban a celebrar:
Finalmente ha llegado el momento en que los discípulos decidan tomar las iniciativas de la lucha. Con el esfuerzo de todos ustedes, lleven a cabo un festival vibrante en el que estalle la alegría, así yo esté presente o no. Si son auténticos discípulos, sin falta podrán lograrlo.
En el transcurso de los años, hemos visto cómo Ikeda Sensei ha trabajado exhaustivamente para completar los 30 volúmenes de La nueva revolución humana. La serialización del volumen 24 empezó el 1.º de octubre de 2010, con el capítulo «Oda a las madres», y finalmente la entrega que concluiría el último volumen [30] se publicó el 8 de septiembre de 2018. En el «Epílogo», leemos:
Mi sincero deseo es que los miembros de la Soka Gakkai consideren la culminación de La nueva revolución humana como un punto de partida personal, y se pongan de pie como «Shin’ichi Yamamotos» a trabajar por la felicidad de los semejantes. Oro para que, con su trabajo tenaz e incansable, escriban su propia historia resplandeciente de revolución humana.
Se puede decir que estos […] años desde que se escribió «Lucha intrépida» han sido un periodo en el que hemos luchado por revelar nuestro potencial como discípulos capaces de alentar a los demás con el mismo corazón del maestro, en lugar de esperar su aliento.
Hoy estamos enfrentando una época de grandes cambios sociales. Precisamente en estos tiempos turbulentos, desafiémonos en avanzar como «Shin’ichi Yamamotos» y hagamos cada día nuestra revolución humana.
EL INICIO DE LA EDUCACIÓN SOKA
El 18 de noviembre de 1930, la fecha en que se publicó el libro Soka kyoikugaku taikei («El sistema pedagógico de la creación de valor») del primer presidente Makiguchi, se conmemora como día fundacional de la Soka Gakkai. En el capítulo «El futuro» se señala que ese día también representa el origen de la educación Soka; y se expone cómo, en el año 1976, la educación Soka experimentó un avance dinámico. Se crearon el Jardín de Infancia Soka de Sapporo y el Departamento de Educación por Correspondencia en la Universidad Soka, extendiendo así su alcance a la enseñanza preescolar y la educación a distancia.
En el capítulo «La luz del aprendizaje» leemos sobre el profundo deseo de los maestros Makiguchi y Toda de ofrecer oportunidades de educación a distancia. Ambos habían iniciado programas por correspondencia y, sin embargo, se habían visto obligados a interrumpir sus planes por diferentes cuestiones: Makiguchi, a causa de la recesión tras la guerra rusojaponesa, y Toda, debido a la aguda inflación tras la Segunda Guerra Mundial. En este sentido, la creación del Departamento de Educación por Correspondencia fue para Shin’ichi una lucha para hacer realidad los sueños de sus mentores: el de Makiguchi Sensei, cuyo ideal era implementar una educación que contribuyera a la felicidad de las personas, y el de Toda Sensei, que deseaba poner la educación al alcance de todos.
Habiendo asistido en su juventud a clases nocturnas de Ciencias Políticas y Economía en el Taisei Gakuin (posteriormente, Universidad Fuji de Tokio), Shin’ichi conocía muy bien el esfuerzo que requería estudiar a distancia. Con el deseo de que los estudiantes en el nuevo departamento llenaran de luz sus vidas y la sociedad a través de la búsqueda del conocimiento, les ofreció el principio rector de aspirar a ser «la luz del aprendizaje». Asimismo, dirigiéndose a los estudiantes de la escuela nocturna, a quienes consideraba preciados sucesores, Shin’ichi los animó:
Con el orgullo de estar siguiendo el mismo camino que yo seguí en mi juventud, es decir, el auténtico camino de inseparabilidad de maestro y discípulo, asuman los mayores desafíos buscando su acendramiento y perfeccionamiento.
En 2020, debido a la pandemia, el Departamento de Educación por Correspondencia llevó a cabo su curso de verano por primera vez de forma virtual. A estas clases asistieron alumnos de todo Japón y de 18 países y territorios del mundo, inaugurando una nueva página en la historia de este departamento.
Al conmemorar el 90.º aniversario de la publicación de Soka kyoikugaku taikei, ahora la gran luz de la educación Soka irradia enérgicamente en todo el mundo.
PASAJES CLAVE DEL VOLUMEN 23
El ser humano siempre está expuesto a nuevos retos. Los acontecimientos de hoy nunca son idénticos a los de ayer. Por eso, es tan importante tener la pasión y la valentía de enfrentar los desafíos. Seguir esforzándose a pesar de los tropiezos y errores, hasta encontrar la mejor solución ante cada prueba de la vida es la manera de acumular verdadera experiencia. («El futuro»).
La vida en sí es un proceso de aprendizaje continuo, y para vivir con dignidad como ser humano es preciso seguir aprendiendo hasta el último momento de la existencia. («La luz del aprendizaje»).
¿Cuáles son los requisitos esenciales que debe reunir un valor humano del siglo XXI? Lo que se precisa es una mente cultivada, así como el tipo de valentía y calidez que se adquieren enfrentando adversidades. («Valentía»).
Las personas que han debido enfrentar los mayores retos son quienes muestran un mayor desarrollo. Y quienes cargan sobre sus hombros el peso del karma más adverso son también poseedores de la misión más noble. («Valentía»).
Los integrantes del Departamento de Hombres son fuertes. Son los pilares dorados del hogar, de la sociedad y de la Soka Gakkai. Sus esfuerzos son decisivos en la lucha por el triunfo del kosen-rufu. («Lucha intrépida»).
RESUMEN DEL VOLUMEN 23
El futuro
El 16 de abril de 1976 se inaugura el Jardín de Infancia Soka de Sapporo, en Hokkaido, prefectura estrechamente relacionada con la vida de los maestros Makiguchi y Toda.
La luz del aprendizaje
Se establece el Departamento de Educación por Correspondencia de la Universidad Soka. Shin’ichi se encuentra con los estudiantes y los alienta.
Valentía
El Hisho-kai (grupo de estudiantes que asisten a la escuela nocturna) da un gran paso adelante. Se interpreta por primera vez la «Canción de la revolución humana».
Lucha intrépida
Shin’ichi participa en seminarios y cursos de verano con el objetivo de alentar a los integrantes del Departamento de Jóvenes.
(Los textos que integran esta sección son traducciones del artículo publicado el 23 de septiembre de 2020 en el Seikyo Shimbun).
[1] ↑ Manifestación de Osaka: Una manifestación de la Soka Gakkai organizada para protestar por la injusta detención de Daisaku Ikeda, quien en ese entonces era el responsable del grupo directivo del Departamento de Jóvenes de la Soka Gakkai, a manos de la Fiscalía Regional de Osaka, bajo la falsa acusación de violar la ley electoral en las elecciones parciales de la Cámara de Senadores de Osaka a comienzos de ese año. Se convocó en el Centro Cívico de Nakanoshima de dicha ciudad el 17 de julio de 1957. Ese día, Ikeda Sensei fue liberado tras dos semanas de interrogatorios a cargo de las autoridades. Al finalizar el caso judicial, que duraría más de cuatro años, fue exonerado de todos los cargos.