Un corazón eternamente juvenil, colmado de esperanza infinita


Mensaje de Año Nuevo de Daisaku Ikeda


Daisaku Ikeda, junto a su esposa, Kaneko | Foto: Seikyo

¡Felicitaciones por el inicio de este «Año de los jóvenes y del avance dinámico» pletórico de flamante energía!

Hoy, en pleno ascenso de una nueva cumbre del kosen-rufu mundial hacia nuestro centenario en 2030, nuevos miembros unidos por profundos lazos kármicos están surgiendo jubilosamente en todo el mundo, y nuestro movimiento por la paz, la cultura y la educación está cobrando un impulso cada vez mayor.

Ante los graves retos que afronta la humanidad, ustedes, mis preciados amigos, han orado con más seriedad que nunca por la protección y la seguridad de sus sociedades, y se han unido más que nunca al actuar por el bienestar y la felicidad de sus semejantes. No hay duda de que Nichiren Daishonin, el Buda del Último Día de la Ley, estará aplaudiendo sus esfuerzos.

En épocas de dificultad, el camino de la Soka es hacer valer el «corazón de un león rey»[1] y enfrentar cada situación basándonos en la «estrategia del Sutra del loto»;[2] es decir, la fe en la Ley Mística. Transformando nuestro karma en misión y venciendo sobre todos los obstáculos mostramos el incalculable poder benéfico de la Ley Mística. Para nosotros, el lugar donde nos encontramos en este momento es el escenario en el cual representar una perpetua epopeya de alegría y de avance dinámico.

La clave para activar ese poder latente inherente a nuestras vidas es una oración imbuida del profundo juramento del kosen-rufu; es entonar el rugido de león de Nam-myoho-renge-kyo; y es afianzar con nuestros compañeros de fe la unión de «distintas personas con un mismo propósito».

Nichiren Daishonin señala: «Gran alegría es lo que uno experimenta cuando comprende, por primera vez, que su mente [o vida] ha sido un buda desde el mismísimo comienzo. Nam-myoho-renge-kyo es la mayor de todas las alegrías».[3]

Con la alegría insuperable de reconocer la dignidad de nuestra vida y de las vidas de todas las personas, sobre la base del potencial de la budeidad que compartimos, demos un impulso impetuoso a nuestra revolución humana, que redundará en el avance dinámico del kosen-rufu y de la paz mundial.

Este año celebraremos el 75.° aniversario de mi primer encuentro con mi mentor, Josei Toda, que marcó el inicio de mi lucha en inseparabilidad de maestro y discípulo. Toda Sensei solía señalar: «En la vida, la esperanza es crucial. Mientras tengan esperanza, podrán acometer cualquier desafío. Sin falta, podrán salir adelante». Recuerdo que también nos decía: «Quienes viven toda su existencia con un espíritu juvenil, con una condición de vida juvenil, son personas realmente admirables».

Con un corazón siempre joven y lleno de esperanza infinita, continuemos alentando, forjando y avanzando junto a los miembros de los departamentos de Jóvenes y Futuro, tesoros de la Soka y de toda la humanidad.

Mi esposa y yo estamos orando con fervor por la salud, la longevidad, la felicidad, la protección, el éxito y la victoria suyas y de sus familias.

¡Mis mejores deseos para todos!

En el Año Nuevo de 2022
Daisaku Ikeda


[1]Carta desde Sado, en END, pág. 320.

[2]La estrategia del «Sutra del loto», en END, pág. 1045.

[3]OTT, págs. 211-212.

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