Reflexionando sobre «La nueva revolución humana»


Volumen 22


Hace setenta años, un joven Daisaku Ikeda lideró la histórica Campaña de Febrero,[1] que tuvo como resultado un impulso del kosen-rufu sin precedentes. Tenía tan solo veinticuatro años, y apenas llevaba cinco practicando. Con su ejemplo, una eterna inspiración para los jóvenes, este año ¡asumamos como propio el compromiso de la campaña «El uno es madre de diez mil»[2] y hagamos realidad el avance dinámico!

JUAN GÓMEZ · BARCELONA

Estar leyendo el volumen 22 de La nueva revolución humana ha sido como estar al lado de mi maestro, aprendiendo cada día de su forma de sentir y de pensar. A la vez, he tenido oportunidad de fortalecer mi vínculo de maestro y discípulo.

Este año he empezado con un nuevo negocio, y me ha alentado mucho en la lectura cuando Sensei, citando al pensador italiano del siglo XIX Giuseppe Mazzini, dice: «El secreto de todas las grandes victorias es la rapidez en el proceder» (pág. 220).[3] Y añade: «En cualquier esfuerzo la celeridad es crucial y es la clave para la victoria. Actuar con lentitud o no tomar las medidas necesarias en el momento preciso conduce a la derrota. La grandiosa victoria del kosen-rufu se concretará cuando cada uno de nosotros actúe con prontitud, centrado en sus deberes cotidianos, y realice cabalmente la tarea que tiene entre manos» (pág. 220).

A través de esta lectura he podido entender que, cuando se tiene el valor de enfrentar los miedos más profundos y las inseguridades ante el Gohonzon, se llega a tomar la decisión acertada, y es así como uno puede cambiar el rumbo de su vida en ese mismo instante, con miras hacia un futuro mejor.

Este año he renovado mi juramento y compromiso con Gakkai para volver a la alegría de transmitir la Ley a todos esos jóvenes sin rumbo en la vida que están sufriendo tanto.

DEVORAH SANCHO · CONIL DE LA FRONTERA

Desafiarse en la lectura de La nueva revolución humana significa, para mí, profundizar en el corazón de Ikeda Sensei. Es como una ventana a la que asomarme y ver cómo atesora, alienta y aprende con cada persona que encuentra. Voy subrayando lo más significativo y después puedo releer las partes que más me han conmovido.

En el volumen 22 me inspiró mucho lo que comparte sobre la figura de Konosuke Matsushita, empresario japonés y fundador de la compañía Panasonic, con quien Sensei mantuvo diferentes diálogos. Por ejemplo, el fragmento donde habla de «la actitud de Matsushita de asumir la total responsabilidad» (pág. 250) me invitó a reflexionar mucho sobre cómo puedo salir de la queja, poner lo mejor de mi parte ante las dificultades, y sobre cómo desafiarme con alegría, ya que «las personas que enfrentan la adversidad con esperanza y con el deseo de esforzarse al máximo no consideran penoso el proceso» (pág. 254).

Tras la lectura, me vuelvo a determinar a crear valor ante los obstáculos que se me presenten, y a apoyar a los miembros de mi grupo de diálogo para que las actividades puedan ser un motor de cambio. En definitiva, quiero hacer de mi vida el escenario donde se siga escribiendo la historia de la Soka Gakkai, como la leemos en La nueva revolución humana.


[1]Véase al respecto, en este número, las secciones «Este mes» y «Especial» sobre todo.

[2]Ib., «Este mes».

[3]Este y los siguientes números de página se refieren a IKEDA, Daisaku: La nueva revolución humana, Vol. 21 y 22, Rivas-Vaciamadrid: Ediciones Civilización Global, 2021.

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