Adquirir tesoros del corazón (2/3)


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De todos los tesoros, el mayor es la vida. Se dice que el valor de nuestro cuerpo y de nuestra existencia es superior, incluso, al de todas las riquezas de un gran sistema planetario. Ni siquiera los tesoros que colman el universo pueden reemplazar la vida.[5]

TRANSMITIR AL MUNDO EL HUMANISMO BUDISTA

En la Soka Gakkai estamos propagando los principios humanísticos del budismo del sol –la enseñanza de Nichiren Daishonin– en todo el mundo.

Creemos en la naturaleza de Buda de cada persona y actuamos con profunda sinceridad, con el deseo de que todos seamos felices. Valorar a cada persona es la forma de poner en práctica los principios del respeto a los congéneres y a la dignidad de la vida, expuestos en el Sutra del loto.

En esta carta, La ofrenda de arroz, el Daishonin enseña el valor infinitamente preciado de la vida. Nos dice que dar una ofrenda de alimento –que brinda sustento a la vida– es lo mismo que ofrendar la vida misma. También escribe que la «determinación seria y sincera»[6] es lo que permite a las personas comunes lograr la budeidad. Este es un pasaje muy importante, que el señor Makiguchi también había subrayado en su ejemplar de los escritos de Nichiren Daishonin.

NADA ES MÁS VALIOSO QUE LA VIDA

 El Daishonin proclama: «El valor de nuestro cuerpo y de nuestra existencia es superior, incluso, al de todas las riquezas de un gran sistema planetario».[7] Nada vale tanto como la vida de una persona. El budismo Nichiren establece una visión profunda y luminosa de la existencia, con su exhortación a priorizar el respeto al valor y a la dignidad de la vida.

En otra carta, dirigida a una discípula enferma, el Daishonin afirma: «La vida es el más preciado de todos los tesoros. Un solo día extra de vida vale más que diez millones de ryos[8] de oro […]. Un día de vida es más valioso que todos los tesoros de un gran sistema planetario».[9] Aquí, el Daishonin subraya el valor inapreciable de la existencia y nos alienta a vivirla al máximo.

DIFUNDIR LA ENSEÑANZA DEL RESPETO A LA VIDA

La profunda revelación que el señor Toda experimentó en prisión, durante la Segunda Guerra Mundial, condujo a revivir en los tiempos modernos la misión de los Bodisatvas de la Tierra[10] de difundir el budismo y la enseñanza del respeto a la vida.

Desde comienzos de 1944, además de entonar Nam-myoho-renge-kyo en su celda de la cárcel, el señor Toda dedicó buena parte del día a leer el Sutra del loto y a examinar sus principios. Como resultado de ello, comprendió la verdad de que el Buda es la vida en sí misma.

También entendió que él era uno de los discípulos a quienes se les había encomendado la propagación del budismo en el Último Día de la Ley, durante la Ceremonia en el Aire[11] descrita en el Sutra del loto. Por sugestiva coincidencia, esta profunda convicción asomó en el corazón del señor Toda en noviembre de 1944, el mismo mes en que su maestro Makiguchi moría entre rejas como prisionero de conciencia.

VIVIR UNA EXISTENCIA LARGA Y SANA COMO BODISATVAS DE LA TIERRA

Nosotros también, como sucesores de los presidentes Makiguchi y Toda, hemos nacido juntos en este mundo como Bodisatvas de la Tierra en respuesta a nuestro propio juramento de transmitir el budismo y su filosofía sobre la dignidad de la vida y el respeto a todas las personas. La esencia de nuestros esfuerzos en aras del kosen-rufu es valorar la existencia de cada persona, basados en la convicción de que no hay nadie que no posea la naturaleza de Buda. Al mismo tiempo, porque la vida de cada uno de nosotros es tan preciada, debemos aspirar a vivirla al máximo cumpliendo nuestra misión.

El capítulo «Distinciones de beneficios» del Sutra del loto explica: «Nuestro deseo es que, en épocas futuras, usemos nuestras vidas longevas para salvar a los seres vivos».[12]

En el Sutra del loto, el Buda que logró la iluminación en el remoto pasado emplea su larga vida para cumplir sus votos de guiar a todas las personas a la iluminación. Los Bodisatvas de la Tierra recorren la senda de la inseparabilidad de maestro y discípulo en la medida en que adoptan el mismo juramento que el Buda de «usar su vida longeva para salvar a los seres» y en la medida en que se comprometen en esta dirección.

Desde la perspectiva de nuestra propia práctica, esto significa la determinación y la oración de seguir perseverando, pase lo que pase, y la dedicación de la propia vida a ayudar y alentar a los demás.

Desde luego, a todos nos llega el momento de morir tarde o temprano. Pero precisamente por esa razón, fieles a nosotros mismos, debemos hacer valer el principio budista de «prolongar la vida a través de la fe»,[13] para no tener nada de que arrepentirnos. Con ese fin, necesitamos tener sabiduría orientada a vivir una existencia larga y saludable.

Desde luego, a todos nos llega el momento de morir tarde o temprano. Pero precisamente por esa razón, fieles a nosotros mismos, debemos hacer valer el principio budista de «prolongar la vida a través de la fe» para no tener nada de que arrepentirnos.

EL ENVEJECIMIENTO EXTREMO DE LA POBLACIÓN JAPONESA

En la actualidad, Japón se considera una sociedad «superenvejecida»,[14] en la que se habla incluso de una expectativa de vida que ronda los cien años. Esto ya está generando nuevos retos y dificultades propios de los tiempos modernos. Pero es aquí donde se destaca la fortaleza de los miembros de Gakkai, que responden a estos desafíos con esperanza y un profundo sentido de la misión, y de ese modo constituyen una fuerte de inspiración cada vez mayor para la sociedad.

En la época impura[15] del Último Día de la Ley, resplandecen más que nunca nuestras acciones, basadas en el respeto a los semejantes, el amor solidario y la convicción en el potencial de todas las personas.

EXPERIENCIAS QUE TESTIMONIAN LA NOBLEZA DE LA VIDA

Finalmente hemos terminado la construcción del Centro Mundial Seikyo de la Soka Gakkai. Este edificio ha sido concebido como un gran bastión de la palabra escrita, dedicado a transmitir el mensaje del humanismo budista a todo el mundo.

El Seikyo Shimbun publica numerosas experiencias de miembros de la Soka Gakkai, tanto de Japón como del mundo. Cada día, el diario incluye noticias que testimonian la nobleza de una vida basada en la fe en el budismo Nichiren y los valores excepcionales de quienes lo practican.

Las experiencias y los resultados que obtienen los miembros son realmente impresionantes. Sobre todo, quienes inspiran con la victoria sobre dificultades económicas, problemas de relaciones humanas y luchas contra enfermedades. Hace poco, se publicó una serie enfocada en la vida de gente mayor que estaba disfrutando de la «alegría ilimitada de la Ley».[16] En estos artículos, los lectores tomaron conciencia de la postura de quienes, entonando Nam-myoho-renge-kyo, están viviendo con plenitud y alegría hasta el final de su existencia y «gozando plácidamente»,[17] mientras confrontan los retos de la vejez, la enfermedad e incluso la muerte.

Su vida transcurre sin restricciones y en libertad. Iluminados por su atractivo como persona y su optimismo a prueba de todo, su abundante sabiduría sobre la vida y su profundo humanismo entibian el corazón de todos. Habiendo dedicado su existencia a la creación de valor, son personas de genuina riqueza, veteranos de la práctica budista, vencedores e inspiradores ejemplos de la enseñanza de que los sujetos comunes somos budas.

Y aunque estén expuestos a la enfermedad y la vejez, las usan como una oportunidad para llevar a cabo su revolución humana y crear valor. Sus pruebas reales irradian la luz de la sabiduría, con la cual alumbran esta época de longevidad demográfica.

LA SALUD ES EL PRODUCTO DE LA SABIDURÍA

Vivir una existencia larga y sana es el resultado de una construcción basada en la sabiduría. Ya que Nam-myoho-renge-kyo es el gran remedio benéfico que resuelve todos los males de la existencia, la base de esa vida sana es hacer daimoku.

La salud es el producto de la sabiduría. Dormir lo suficiente es uno de los pilares fundamentales para mantenerse saludable. Tomen sabiamente las medidas necesarias para asegurarse un buen descanso nocturno. Por ejemplo, ir a la cama lo más temprano posible, antes de que el agotamiento supere los límites, es una expresión de sabiduría derivada de la determinación en la fe.

También es importante enfocar el daimoku concretamente en tener una vida larga y sana. Oren para estar bien de salud y para mantener alejado al demonio de la enfermedad, para poder cumplir el gran juramento que los condujo a esta existencia. Oren con la decisión de estar sanos y vivir muchos años, por sus seres queridos, por sus camaradas de fe y por el kosen-rufu. La oración amplia y elevada de guiar a la felicidad a otras personas se transmitirá directamente al Gohonzon y activará las funciones protectoras del universo.

EL DAISHONIN TIENE CONCIENCIA DE SUS SINCEROS ESFUERZOS EN BIEN DEL KOSEN-RUFU

A medida que uno va sumando años, es natural no poder mantener el mismo ritmo que en la juventud. Pero si están decididos a dar lo mejor y a entonar daimoku todo lo posible para apoyar a sus sucesores, podrán seguir contribuyendo sin fin al kosen-rufu. Su presencia en las reuniones de diálogo también inspira y tranquiliza a otros miembros. Y el hecho de que, a una edad avanzada, todavía se mantengan fuertes y resueltos demuestra los beneficios de practicar el budismo Nichiren. Su vida larga y vigorosa es prueba de su victoria y un modelo para todos los que integran su comunidad.

Quienes no pueden movilizarse físicamente para asistir a los encuentros también pueden impulsar el kosen-rufu atendiendo asuntos domésticos. Y aunque no estén confinados en cama, pueden transmitir su corazón con una simple sonrisa o con sus miradas, que también siembran las semillas de la budeidad.

La sinceridad de su labor por el kosen-rufu, aunque pase inadvertida a los demás, sin falta es reconocida por el Buda. Y, sin duda, adornará su vida de inmensos beneficios y buena fortuna.

Los «tesoros del corazón»[18] que han adquirido con sus largos años de práctica budista jamás perecerán. Incluso si alguien falleciera a una edad relativamente joven o a raíz de un accidente repentino, o perdiera el dominio de las facultades mentales, los tesoros del corazón que ha creado como practicante del Sutra del loto jamás se destruirán. En el Sutra del nirvana se lee: «Un elefante fuera de control [es decir, un obstáculo externo que puede causarnos daño] solo puede destruir vuestro cuerpo, pero no vuestra mente[19]».[20]

El Daishonin también escribe: «Más valiosos que los tesoros de los cofres son los del cuerpo. Pero ninguno es tan preciado como los tesoros del corazón».[21]

Los tesoros de los cofres (riqueza material) y los tesoros del cuerpo (la salud física, las aptitudes y capacidades, y la posición social) no son imperecederos. Pero los tesoros del corazón quedan grabados en nuestra vida y trascienden esta existencia, por toda la eternidad. Por eso, el Daishonin nos exhorta a «esforzarnos por acumular los tesoros del corazón».[22] Porque practicamos la Ley Mística, podemos acrecentar estos tesoros cada día.

En la conclusión de La apertura de los ojos, el Daishonin escribe: «Por lo que hice, fui condenado al exilio, pero este es un sufrimiento menor, limitado a mi existencia actual, y del que no vale la pena lamentarme. En mis existencias futuras, disfrutaré de una inmensa felicidad, y este pensamiento me colma de profunda alegría».[23]

Ya que hemos tenido la buena fortuna de nacer en este mundo y conocer la Ley, sin duda ya hemos entrado en el camino hacia una felicidad que perdura a través de las tres existencias del pasado, presente y futuro. Todas las dificultades de nuestra existencia actual son «sufrimientos menores», porque tenemos asegurada una «inmensa felicidad» en futuras existencias.

(Continuar leyendo la parte 3/3).


[5]END, pág. 1171. Nichiren Daishonin escribió La ofrenda de arroz cuando vivía en el monte Minobu. Se cree que esta carta, en respuesta a un obsequio de arroz, fue dirigida a los discípulos de la región de Fuji, aunque se desconocen mayores detalles. En el texto, el Daishonin analiza el significado de ofrendar señalando que los beneficios de hacer ofrendas que mantienen la vida, «el tesoro mayor», son incalculables, y dice que el arroz pulido que ha recibido es igual a la vida misma.

[6]Ib.

[7]Ib.

[8]Ryo (jap.): Unidad de peso de Japón, derivada de una medida equivalente usada en la antigua China. Un ryo equivalía a 37,5 gramos, pero en distintos períodos históricos, el ryo fue cambiando de valor.

[9]END, pág. 1000.

[10]Bodisatvas de la Tierra: Innumerables bodisatvas que aparecen en el capítulo «Surgir de la tierra» (15.°) del Sutra del loto, a quienes Shakyamuni confía la tarea de propagar la Ley después de su muerte. En el capítulo «Poderes sobrenaturales» (21.o), juran difundir la enseñanza del Buda en el mundo saha, y en la época perversa correspondiente al Último Día de la Ley, liderados por el bodisatva Prácticas Superiores.

[11]Ceremonia en el Aire: Una de las tres asambleas descritas en el Sutra del loto, en la cual toda la congregación de personas queda suspendida en el espacio por sobre el mundo saha. Va desde el capítulo 11.o, «El surgimiento de la torre de los tesoros», hasta el 22.o, «La transferencia». El corazón de esta ceremonia es revelar la iluminación original del Buda en el remoto pasado y la transmisión de la esencia del sutra a los Bodisatvas de la Tierra, guiados por el bodisatva Prácticas Superiores.

[12]SL, cap. 17, pág. 237.

[13]Prolongar la vida a través de la fe: Este principio se basa en un pasaje del Sutra del loto, en el capítulo 16.°, «Duración de la vida», donde se lee: «Te pedimos que nos cures y nos permitas seguir viviendo». Véase El Sutra del loto, cap. 16, pág. 226. Esto aparece en la parte que explica la parábola del médico excelente; este da un «buen remedio» a sus hijos que han bebido un «veneno» (es decir, han sucumbido a la ilusión) y le suplican que los cure de su intoxicación. Cuando aceptan y beben el remedio (es decir, cuando adoptan la fe en la Ley prodigiosa del Sutra del loto) se curan y pueden disfrutar de una larga vida.

[14]La Organización Mundial de la Salud y las Naciones Unidas consideran que una sociedad es «superenvejecida» cuando los adultos mayores de 65 años superan el 21% de la población total.

[15]Época impura: Este término aparece en el capítulo «Medios hábiles» (2.°) del Sutra del loto y se refiere a la época en que prevalecen las cinco impurezas. Las «cinco impurezas» son las que afectan a la época, el deseo, los seres vivos, las ideas y la duración de la vida.

[16]Alegría ilimitada de la Ley: La felicidad suprema y última del Buda, que es el beneficio de la Ley Mística.

[17]En el capítulo «La duración de la vida» del Sutra del loto, el mundo en que vivimos se describe como un lugar donde «plácidos, gozan los seres vivos» (véase SL, cap. 16, pág. 229). Esto indica que el mundo saha, normalmente considerado un ámbito de sufrimiento, en realidad es la Tierra de la Luz Tranquila, una tierra de Buda donde todos los seres pueden experimentar un gozo supremo.

[18]Véase END, pág. 892.

[19]Cabe interpretar que morir atacado por un elefante enfurecido es análogo a perder la vida en un accidente o desastre inesperado.

[20]WND-2, pág.220.

[21]END, pág. 892.

[22]Véase ib.

[23]END, pág. 304.

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