¡Den un paso al frente y difundan la filosofía del respeto a la dignidad de la vida!
Este mes inauguramos una nueva serie de disertaciones de Daisaku Ikeda perteneciente a la más amplia serie Iluminando el mundo con el budismo del sol: A nuestros jóvenes del Departamento Futuro, abanderados de la justicia, que son nuestra gran esperanza en el mañana.
En estos tiempos convulsos, la gente busca una nueva filosofía de esperanza. Vivimos en un mundo plagado de dificultades, que reclama de manera imperiosa el surgimiento de más personas capaces dedicadas a la creación de valor.
Hoy en día, la humanidad está embarcada en una lucha sin cuartel contra un enemigo invisible: el coronavirus. Todos ansían con fervor que esta pandemia termine; con ese fin, es necesaria una convergencia de recursos y de sabiduría para responder a este reto sin precedentes.
¿Dónde hallar fuerzas para disipar los nubarrones que oscurecen el corazón de la gente y ayudarnos unos a otros a ser personas más sabias, más fuertes y mejores?
Las religiones surgieron cuando el ser humano fue expresando sus anhelos más imperiosos y firmes en forma de plegarias o de oraciones. No es exagerado decir que, en la época actual, la humanidad está reexaminando en todo el mundo el verdadero valor de las prácticas religiosas.
EL SUTRA DEL LOTO PERMITE A TODOS LOGRAR LA BUDEIDAD
Todos ustedes, los miembros del Departamento Futuro del mundo que están viviendo su etapa juvenil en medio de esta época turbulenta, tienen la profunda misión de crear una nueva era de respeto a la dignidad de la vida, practicando firmemente las enseñanzas del budismo del sol de Nichiren Daishonin.
El Sutra del loto describe una escena en la cual logra la budeidad una niña de ocho años, la hija del Rey Dragón.[1] Con ello, hace constar que todos los seres pueden iluminarse, cualquiera sea su género. Hay algo muy significativo en la tradición de la Soka Gakkai de atesorar a los niños y adolescentes del Departamento Futuro.
EMISARIOS DEL FUTURO
Mi maestro Josei Toda, el segundo presidente de la Soka Gakkai, a menudo decía que los niños eran emisarios del infinito pasado, y que venían a este mundo para permitir lograr la budeidad a sus padres y a otras personas cercanas a ellos. También decía que eran tesoros del mañana y que teníamos que respetarlos y cuidarlos con todo esmero, conscientes de que eran embajadores del futuro.
Nunca como ahora hubo esperanzas y expectativas tan grandes en nuestros miembros del Departamento Futuro. ¿Por qué? Porque la generación de ustedes, en la medida en que convierta los desafíos del presente en el escenario principal de su crecimiento, estará en la primera línea cuando celebremos el centenario de la Soka Gakkai (en 2030) y será la que habrá de determinar el rumbo del siglo xxi. Por ende, ustedes son tesoros de valor incalculable, con la prerrogativa de construir un mañana más venturoso en bien del género humano. Cada uno y cada una de ustedes es una inmensa esperanza para la sociedad global.
POR SU FUTURO
En esta entrega y las próximas dos, quisiera estudiar pasajes de los escritos del Daishonin junto con ustedes, abanderados de la justicia, que recibirán y transmitirán a otros el relevo del kosen-rufu mundial. Quiero que exploremos juntos temas como el significado de la fe, la forma correcta de vivir y la importancia de tener esperanzas y sueños.
La filosofía del budismo Nichiren es profunda y, aunque al principio no la entiendan en su totalidad, llegará un día en que reconocerán el verdadero valor de todo lo que hemos estudiado aquí. Espero que algo de lo que puedan asimilar en estas disertaciones, aunque sea un poco, los ayude luego en la vida.
En esta primera entrega, me propongo analizar El verdadero aspecto de todos los fenómenos. Hace algunos años (en 1966), di una conferencia sobre este texto para algunos de sus predecesores del Departamento de Estudiantes de Educación Media Superior.
Allí, el Daishonin nos enseña que, como discípulos directamente relacionados con él, tenemos la misión de impulsar el kosen-rufu en bien de la humanidad, del mundo y del porvenir.
(Continuar leyendo la parte 2/3).
[1] ↑ Niña dragona: Dragona de ocho años, hija de Sagara, uno de los ocho grandes reyes dragones que, según se afirmaba, vivían en un palacio en el fondo del mar. En el Sutra del loto, logra la budeidad y jura rescatar del sufrimiento a todos los seres.